Hay quienes salvan ciudades, quienes corren maratones y quienes dan los mejores consejos amorosos… y luego están los verdaderos héroes de la vida diaria: los que dominan la parrilla. En La Vicenta esos héroes existen, y los reconoces fácil: huele a brasa, hay humo en el aire y el antojo empieza antes de sentarte.
La parrilla es el corazón de todo
Nuestra parrilla no es solo cocinar, es una habilidad que mezcla paciencia, práctica y puro amor por el sabor. Nuestros parrilleros saben exactamente cuándo girar cada corte, cuánto reposar la carne y cómo lograr ese jugo perfecto que hace que te quedes mirando el plato con una sonrisa antes de darle la primera mordida. Aquí, cada corte pasa por manos expertas que entienden que no es solo carne, es una experiencia grill.
Cortes que hablan por sí solos
Rib eye con marmoleo que enamora, arrachera suavecito, short rib que se deshace y, claro, el famoso filete al trapo que siempre sorprende. Y si eres de los que quieren probar un poco de todo, nuestras parrilladas y combos son la jugada maestra para que la mesa completa diga: “ok… esto se puso serio”.
Comer bien se disfruta más cuando se comparte
En La Vicenta el plato va al centro, las historias llegan solitas, el chisme fluye, la risa se prende y el brindis se hace sin pensar demasiado. Y obvio, tragos dobles todo el día. Porque comer bien se disfruta más cuando tienes con quién celebrarlo.
Vete ALV (A La Vicenta, obvio)
La Vicenta no es solo un restaurante de carne. Es ese lugar donde sabes que la vas a pasar bien, donde la mesa se vuelve círculo de confianza y donde, de alguna forma, siempre terminas quedándote más tiempo de lo que pensabas.
Reserva tu mesa en nuestro sitio web y síguenos en redes sociales para estar al tanto de promos, eventos y todo lo que se está cocinando alrededor de la parrilla.